Bien... hoy me llegó un mensaje de este blog. www.muniecosycuentosparaelalma.blogspot.com
Lo creía perdido, no recordaba la contraseña.
Pensamos en hacer uno nuevo, en eso estamos y de pronto, este mensaje...relacionado a los Niños del agua, una publicación de Facebook, nacida de este intento de hacer muñecos para niños no nacidos.
De muy lejos venía, pedía palabras... pedía poner palabras...a la muerte.
Se puede? Se puede nombrar algo que no existe? Y sino existe... por qué duele tanto? Qué es lo nos duele? La partida o el desamparo? Qué es lo que existe? La muerte o la vida vacía y desgarrada del que se queda sin nada...sin amparo.
La verdad me cuesta mucho escribir en una página pública, escribo y borro todo el tiempo, me da esa sensación de desnudez y nunca se cuál es el beneficio de exponerme así, pero este mensaje me dió valor y una llamada por teléfono y una charla nocturna también así que te voy a contestar... con palabras.
Me preguntas en ese mensaje porque la gente para no dañar no nos pregunta que nos pasó.
Me preguntas si es que nos evitan porque estamos sucias o no preguntan para invisibilizar el tema o no preguntar porque no se bancan las lágrimas de un ser que aman…o no preguntan porque no nos quieren.
Y yo no creo que no pregunten...creo que lo hacen a su manera... creo que para hablar con palabras hay que vencer una barrera muy personal y emocional...
Yo tarde muchos años, muchos, muchos en hablarle a mi primer hija... se iba a llamar Ana.
Y sabes que? nadie, salvo su padre sabe eso... y ahora de pronto, una red social... sabes lo que me costó cruzar esa barrera? de saberlo sólo dos personas en el mundo y ahora todo el que quiera leer esto? esa misma barrera es la que cruzamos cuando le preguntamos a un ser querido que le duele. Para mí es la misma, tan pequeña como una voz y tan grande como un abismo. Tan fácil de escribir y a la vez tan estremecida…siempre hay un abismo entre lo que Es y lo que se nombra...esa barrera de preguntar sin saber si te bancas la respuesta...un abismo.
Y los abismos cada uno los enfrenta como puede.
No sientas que no te quieren, no sientas que estas maldita, sucia o fallada, no sientas que estas muerta por no haber dado vida... la diste. Como pudiste.
No sientas que no preguntan... preguntan... saben... presienten... te sostienen como pueden... cruzan o no el abismo, usan o no la voz pero preguntan...
Gracias por pedir palabras... no sé ni como sos ni dónde estas...pero si te sirve una palabra mía...tomá la que quieras... así como nuestros hijos vienen y toman... y nos dejan un beso en el alma que tardamos a veces mucho tiempo en descubrir...
